Gracias Señor por tu inmenso amor, por escuchar mis llamados, por mostrarme Tu Rostro y darme Tu Luz.
Has llegado a mi vida y me tomas entre tus manos como una pequeña planta que cuidas y haces crecer. Señor Te amo con todo mi ser.
Bendito y alabado seas por siempre, dame Señor tu paz, bendíceme para que pueda seguir tu llamado como deseas y debe ser.
Dame Señor tu Luz para no extraviarme en el camino. Se siempre mi compañero no me abandones que sin Ti nada soy.
Bendice Señor al mundo entero, sana a la humanidad, no dejes que se pierda, envía Señor Tu Espíritu y transforma la faz de la Tierra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario