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En la quietud del amanecer te siento y preparo mi alma a recibirte.

Bendigo cada partícula del universo que me rodea, gracias Señor por tu bondad infinita. Porque nos has creado un lugar maravilloso a todas tus creatura y, porque nos brindas todo lo necesario para nuestro existir.

Cada mañana, después de reponer en el descanso de la noche, nos permites en tu Voluntad Divina, vivir para gozar, recrear y crecer en el Amor en Tu Creación.

Gracias Dios por todo lo que nos brindas, y perdona que no lo valoremos y nos olvidemos de agradecer, de compartir con otros, e incluso de quejarnos por que somos insaciables. No tomes en cuenta nuestros errores y faltas. Estamos aprendiendo a Amarte y a amar como debe ser.

Ayúdanos Señor con tu Luz para ser más sensibles a tu Amor y Tu Presencia, para que nuestras almas crezcan; te alaben y glorifiquen como lo hace cada creatura de la naturaleza.

Sin Ti Señor, ¿Qué somos?  Sin tu amor Señor, ¿Qué vida tendríamos?

Bendito y alabado seas por siempre Dios Santo Misericordioso, que amas a tus creaturas con infinita ternura.

Gracias Padre, te amo.